La comodidad en tu propia piel se trata de aceptar quién y qué eres. Esto implica olvidar lo que otras personas dicen y piensan, eso es asunto de ellos.
1. Deja de preocuparte tanto por lo que piensen los demás
Si quieres sentirte cómodo en tu propia piel, tienes que dejar de preocuparte por lo que piensen los demás. Si estás intentando demasiado que le gustes a otras personas o que te acepten, entonces no te preocupas lo suficiente por cómo te sientes contigo mismo.
Al final, siempre tendrás que vivir contigo. Por lo tanto, deja de preocuparte por lo que piensen los demás y empieza a centrarte en cómo te sientes contigo mismo.
2. Date cuenta de que nadie es perfecto
Algunos de nosotros tenemos un impulso interior de ser perfectos. Creemos que si conseguimos que todo el mundo nos quiera y seamos perfectos, entonces nos sentiremos cómodos con quienes somos y entonces podremos empezar a aceptarnos a nosotros mismos.
La cuestión es que, para sentirse cómodo en su piel, no se trata de intentar ser perfecto. Se trata de aceptar el hecho de que no eres perfecto, pero tampoco lo es nadie más. Date la misma licencia para ser menos que perfecto que le das a todos los demás en tu vida para que se sientan cómodos en su propia piel.
3. Comprende que todo el mundo tiene cosas sobre sí mismo que no le gustan
Todo el mundo, y quiero decir todo el mundo, tiene cosas sobre sí mismo que no le gustan. La chica más guapa y el chico más guapo esconden una inseguridad sobre sí mismos que tú no conoces.
Eso te lo puedo garantizar. Para sentirse cómodo en tu propia piel, a veces es bueno saber que no estás solo. Todos tenemos cosas sobre nosotros que desearíamos no tener, o cosas que desearíamos tener.
4. Conoce el secreto de que todos tenemos momentos en los que nos replanteamos y cuestionamos
Sí, todo el mundo replantea cosas en su vida y se cuestiona continuamente quién y qué es. Está bien. Es totalmente humano preguntarse quién eres realmente, si eres una buena persona y si estás haciendo lo correcto.
Todos lo hacemos. Para encontrar la aceptación de ti mismo, tienes que saber que no eres el único que lucha consigo mismo con bastante frecuencia.
5. Acepta el hecho de que todos tenemos “locura”
Todos tenemos un lado loco. No el tipo de locura salvaje, la pura locura. Si crees que eres el único que mantiene la locura dentro, estás muy equivocado. Todos autocontrolamos nuestros comportamientos y luchamos contra nuestro chiflado interior.