Ser amable: una máscara social
La amabilidad es una expectativa social donde se puede sufrir repercusiones directas por no serlo. Las consecuencias de no ser amable pueden variar mucho, dependiendo del entorno.
La bondad, en cambio, no suele tener repercusiones personales. No te afectará realmente si no donas a una organización benéfica, recoges a ese gatito o ayudas a una persona mayor a cargar sus compras.
La bondad: un acto desinteresado
La bondad es una elección activa de aportar positividad a alguien que la necesita, no solo a las personas, sino también a los animales, las causas sociales o las organizaciones benéficas. La bondad se esfuerza por mejorar el mundo desinteresadamente.
Ser desinteresado no significa ser un mártir, sino actuar considerando a los demás antes que a uno mismo. Puede ser algo tan simple como donar dinero a una organización benéfica, incluso si tienes poco dinero.
La bondad: a menudo difícil
La bondad requiere vulnerabilidad, comprensión emocional de uno mismo y enfrentar situaciones difíciles. Por ejemplo, apoyar a un amigo con depresión puede ser emocionalmente agotador.
La amabilidad: puede surgir de la inseguridad
La amabilidad puede estar arraigada en problemas de autoestima o sentimientos de insuficiencia. Una persona puede ser amable porque es la forma más fácil de evitar conflictos.
La bondad: sobre la conexión
La bondad requiere vulnerabilidad y muestra el lado empático de quién eres, permitiéndote conectarte con el mundo. Ayudar a una persona mayor, recoger a un gatito o hacer donaciones son formas de mejorar el mundo con tus propias manos.
Las personas amables son fáciles de aprovechar
La máscara social de la amabilidad puede hacer que una persona sea aprovechada. Es posible que no tenga buenos límites o la capacidad de decir que no.
La verdadera bondad, sin embargo, es una elección meditada de poner tu energía en el mundo de una manera que te respete. Puedes ser desinteresado porque te consideras más importante que los demás, pero no deberías quemarte.
Las personas bondadosas no siempre son amables
Las personas bondadosas no siempre son amables porque no quieren causar incomodidad. En cambio, pueden no ser confiables porque no serán honestas cuando se necesite honestidad.
Aprender la bondad
La bondad es una habilidad que puedes aprender y desarrollar. Puede comenzar con cosas simples como ayudar a otros sin esperar nada a cambio. Cuestiona tus hostilidades y habla con personas amables.
No tienes que sentirte brillante y maravilloso para ser una persona amable. La bondad es una elección, una habilidad que puedes aprender. No dejes que la gente ignorante te diga lo contrario.
Preguntas frecuentes
¿Cuál es la principal diferencia entre ser amable y ser agradable?
La amabilidad es una actitud y un comportamiento activo que busca mejorar el bienestar de los demás, mientras que la amabilidad es una máscara social que se utiliza para interactuar con el mundo.
¿Puede una persona ser amable pero no agradable?
Sí, una persona puede ser amable sin ser agradable, ya que la amabilidad se basa en la compasión y el deseo de ayudar, mientras que la amabilidad se basa en la conformidad social.
¿Puede una persona ser agradable pero no amable?
Sí, una persona puede ser agradable por razones superficiales, como el deseo de evitar conflictos o ganar aprobación, sin tener verdadera compasión o bondad.
¿Es la amabilidad una cualidad innata?
No, la amabilidad es una habilidad que se puede aprender y desarrollar a través de la práctica y el esfuerzo.
¿Por qué es importante ser amable?
La amabilidad tiene muchos beneficios, como mejorar las relaciones, reducir el estrés, aumentar la resiliencia y contribuir a un mundo más positivo.