Orígenes del Concepto
El concepto del “chivo expiatorio” proviene de un pasaje del Antiguo Testamento, donde se transferían simbólicamente los pecados del pueblo a un macho cabrío, que luego era desterrado al desierto, llevando consigo toda la culpa y los problemas.
En términos modernos, un chivo expiatorio es un individuo que es culpado injustamente por las fechorías de otros, generalmente en familias disfuncionales, especialmente aquellas donde los miembros tienen trastornos emocionales o de personalidad.
Narcisismo y Trastorno Límite de la Personalidad
Cuando un padre es narcisista o tiene trastorno límite de la personalidad, es casi inevitable que un miembro de la familia acabe siendo el chivo expiatorio. El individuo señalado, normalmente el más estable emocionalmente, lleva la peor parte de la ira de su abusador.
Otros miembros de la familia suelen seguir el ejemplo del abusador principal y lanzan calumnias contra el chivo expiatorio. Después de todo, es mucho más fácil culpar a otra persona de los problemas que asumir la responsabilidad.
Motivos para Asumir el Rol
Algunos chivos expiatorios de la familia asumen voluntariamente esta carga para proteger a miembros vulnerables. Por ejemplo, un hermano mayor podría soportar esta injusticia para evitar que sus hermanos menores sufran la ira de un padre narcisista. De manera similar, un padre podría ceder ante la rabia de su cónyuge para mantener la paz y proteger a sus hijos.
Señales de Ser un Chivo Expiatorio
Existen patrones y señales específicos que se suelen observar en el chivo expiatorio:
- Se le culpa de todo lo que sale mal.
- Su abusador proyecta sus propios comportamientos sobre ellos.
- El abuso verbal es constante.
- Sus éxitos son menospreciados.
- Otros miembros de la familia ignoran el abuso.
- El abuso puede extenderse más allá de la familia.
- El chivo expiatorio a menudo asume el papel de salvador.
- El abuso se manifiesta en su bienestar.
Cómo Lidiar con el Rol
Lidiar con el abuso como chivo expiatorio puede ser una tarea difícil, pero aquí tienes algunos consejos para ayudarte:
- Reconoce tu fuerza: Los chivos expiatorios suelen ser los más fuertes de todos los involucrados.
- Sé dueño de tu valía: Recuerda que mereces respeto y amor.
- Llama la atención sobre el comportamiento abusivo: Detén lo que estás haciendo y confronta abiertamente el comportamiento inaceptable.
- Evita reforzar el comportamiento: No panderes al comportamiento abusivo de tu abusador.
- Crea distancia y establece consecuencias: Considera la posibilidad de mudarte o establecer límites claros para el comportamiento de los demás.
Sanación a Largo Plazo
Sanar las heridas de ser un chivo expiatorio es un proceso largo:
- Busca ayuda profesional: Habla con un terapeuta para procesar tus experiencias y desarrollar estrategias de afrontamiento.
- Rodéate de personas que te traten bien: Cultiva relaciones sólidas y de apoyo.
- Establece límites saludables: Identifica y aborda los comportamientos dañinos en otras relaciones.
- Crea una visión de futuro: Ten una imagen clara de la vida que deseas y trabaja hacia ella.
Amor y Responsabilidad
Recuerda que no estás obligado a amar a quienes te han maltratado. Si necesitas cortar lazos para sanar, está bien. Sin embargo, si aún sientes amor, puedes amarlos desde la distancia, enviándoles energía positiva y deseándoles lo mejor.
Preguntas frecuentes
¿Qué es un chivo expiatorio?
Un chivo expiatorio es una persona a quien se le atribuyen injustamente las culpas de los demás.
¿Cuáles son las señales de que soy el chivo expiatorio de la familia?
- Te culpan de todo lo que sale mal.
- Tu abusador proyecta sus propios comportamientos en ti.
- El abuso verbal es constante.
- Tus éxitos y logros son menospreciados.
- El abuso es ignorado por otros.
- El abuso se extiende más allá de la familia.
- A menudo desempeñas el papel de salvador.
¿Cómo puedo responder si soy el chivo expiatorio de la familia?
- Denuncia el comportamiento de inmediato.
- Evita reforzar su comportamiento.
- Crea distancia y establece consecuencias claras.
¿Cómo puedo sanar el dolor a largo plazo?
- Busca ayuda profesional.
- Rodéate de personas que te traten con amabilidad, amor y respeto.
- Establece límites saludables con los demás.
- Crea un tablero de visión.
- Reconoce que eres digno de ser visto, escuchado y valorado.