¿Es algo que dijiste? Quizás tenga más que ver con cómo lo dijiste. Aquí te explicamos cómo evitar parecer arrogante al hablar con la gente.

La comunicación es esencial, eso es muy cierto. Sin embargo, no siempre es fácil comunicarse.

Puede haber momentos en los que digas una cosa, pero el receptor la percibe de manera diferente. Esto da lugar a una mala comunicación, una posible discusión y posiblemente incluso un conflicto duradero. Uno de los culpables más comunes de la mala comunicación es ser arrogante. Nadie quiere hablar con alguien que lo sabe todo y te lo restriega en la cara. Esto instantáneamente hace que las personas te perciban negativamente y, a su vez, puede afectar drásticamente tus relaciones con otras personas.

Cómo evitar ser arrogante

Puede haber casos en los que sientas que te etiquetan erróneamente como arrogante, cuando solo te estás expresando. Pero solo para estar seguro, es mejor seguir estos consejos para asegurarte de no dejar una mala impresión en las personas con las que hablas.

1 Prefiere la opinión con la frase, “Podría estar equivocado, pero…”

Si comienzas la expresión de tu opinión con esta frase, entonces le haces saber a las personas con las que estás hablando que eres consciente de la posibilidad de que puedas estar equivocado. Al hacerlo, les muestras que aceptas el hecho de que no siempre tienes la razón. Esto por sí solo puede reducir la apariencia de arrogancia y puede hacerte parecer una persona más razonable y amable.

2 Escucha genuinamente las opiniones contrarias.

Si expresas una opinión sobre un tema en particular, no es una buena idea simplemente descartar todo lo que la otra persona tiene que decir después de esto. Si los descartas automáticamente, te hará parecer un verdadero idiota. Pero, por otro lado, si escuchas con calma su respuesta, entonces sentirán que les has dado suficiente respeto y atención a lo que tenían que decir. Las personas hablan para ser escuchadas, y cuando la persona con la que estás hablando se da cuenta de que estás lo suficientemente abierto como para escuchar lo que tienen que decir, entonces esto puede ser suficiente para hacerte parecer menos arrogante.

Leer Más:  Reentrando al mundo de las citas en la mediana edad: desafíos y oportunidades

3 Cita tus opiniones con hechos, si puedes.

La importancia de los hechos es que hacen que tu opinión sea más creíble. Si puedes aportar hechos para respaldar tu opinión, entonces no pareces irracional o inmaduro. En cambio, te verás como una persona inteligente que ha investigado y que sabe de lo que está hablando. Sin embargo, nunca, nunca intentes inventar tus hechos o atribuir erróneamente la fuente de tus hechos. Cuando se descubre que estás sacando “hechos” de tu trasero, entonces eres tú quien se verá más como un idiota.

4 Cuida tu tono de voz.

Esta es una de las señales no verbales más reveladoras que la gente suele notar. Cuando expreses tu opinión, trata de no sonar como si estuvieras empujando esa opinión por la garganta de la gente. En cambio, opta por un tono amistoso y tranquilo para asegurarte de que no surjan conflictos porque la gente perciba tu arrogancia.

5 Cuida tu lenguaje corporal.

De manera similar al tono, el lenguaje corporal puede expresar muchas emociones. Si eres demasiado dominante con tu lenguaje corporal, entonces esto puede hacer que la gente piense que estás siendo demasiado dominante y, por lo tanto, arrogante. Así que evita señalar con el dedo, una mirada altiva en tu rostro, mirar a otras personas con desprecio o cruzar los brazos con autoridad. Evitar estos y optar por una postura más relajada y cómoda ayudará a que otras personas se sientan más cómodas a cambio. Cuanto más cómodos se sientan, es menos probable que te perciban como arrogante.

6 No acapares toda la conversación.

Si has estado hablando mucho o sospechas que has tenido más de tu parte justa del enfoque de la conversación, entonces intenta hablar menos y escuchar más. Puedes lanzar una pregunta para que otras personas la respondan, o puedes hacer una pausa cortésmente para que otras personas comiencen a hablar. Esto puede dar la impresión de que eres amable y respetuoso, en lugar de arrogante e irrespetuoso.

Leer Más:  Decisiones que debes tomar tú solo en una relación

7 No se lo restriegues en la cara a la otra persona si resulta que tienes razón.

Hacer esto muestra una falta de respeto por la otra persona o los sentimientos de las personas. No solo te hace parecer arrogante, sino que también te hace parecer un idiota. Por lo tanto, incluso si estás realmente emocionado por tener la razón, asegúrate de ser sensible con las otras personas que te rodean cuando expreses tu felicidad por esto.

8 Hazle preguntas a la otra persona.

Además de escuchar las opiniones de otras personas, hacerles preguntas puede ayudar a mostrar un interés genuino en lo que tienen que ofrecer a la conversación. Hacer preguntas ayudará a que la situación parezca mucho más de dar y recibir, y mucho menos como si estuvieras introduciendo tus opiniones de manera arrogante.

9 Dale tiempo a la otra persona para reflexionar sobre lo que has dicho.

Si das una opinión, no es útil decir: “¿Verdad? ¿Verdad?” después. Esto puede dar la impresión de impaciencia y arrogancia. En cambio, puedes intentar dejar pasar unos segundos antes de responder. Esto le dará a la persona tiempo para pensar en lo que ha dicho, sin ser interrumpida, y debería ayudarla a sentir que la tratan con respeto.

10 Responde respetuosamente cuando la otra persona da una opinión.

Ocasionalmente, alguien puede dar una opinión sobre algo con lo que no estás de acuerdo. En lugar de empujar tu contraopinión por su garganta en la primera oportunidad en la conversación, responde respetuosamente y en el momento apropiado. A veces puede ser difícil esperar el momento apropiado para responder cuando alguien dice algo con lo que no estás completamente de acuerdo. Pero al contar mentalmente unos segundos, puede evitar arremeter impulsivamente y ofender a la persona con la que está hablando.

Leer Más:  Confianza y respeto: pilares esenciales en el matrimonio

La forma en que expresas tus opiniones puede tener un impacto real en cómo te perciben. Muchas veces es genial ser percibido como seguro de sí mismo. Sin embargo, a muchas personas no les gusta que las vean como arrogantes. ¡Con solo unos pocos ajustes en tus patrones de conversación, puedes pasar de parecer arrogante a parecer seguro de ti mismo!

Previous post El ingenioso arte del sentido del humor seco: ¿Lo tienes?
Next post ¿Soy tóxico? Cómo aprender a ver la toxicidad en ti mismo
Pinterest
Telegram
WhatsApp