Las señales de una relación forzada: ¡no ignores tu intuición!

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El amor verdadero, no el amor forzado

¿Sientes que tu relación es ruidosa y conflictiva o silenciosamente carente de algo esencial? Sea cual sea el problema, estás ignorándolo. En lugar de ello, estás obligando a tu pareja a amarte o a ti mismo a amarla.

Ese no es amor verdadero; es amor forzado. Y por mucho que te esfuerces, cuando fuerzas una relación, está condenada al fracaso desde el principio.

¿Qué significa forzar una relación?

Forzar una relación significa que sigues queriendo estar con esta persona, independientemente de lo que te diga tu instinto. Puedes ser profundamente infeliz con ella, pero estás decidido a hacer que las cosas funcionen por una razón u otra.

Estás tratando de sentir algo por ella para justificar tu permanencia en la relación.

“Simplemente no lo siento” o “No eres tú, soy yo” no son solo frases sin sentido que la gente dice para evitar una relación. A veces se trata realmente de un sentimiento que falta o de una química entre vosotros, en el sentido de algo que no puedes influir, controlar, cambiar o crear, aunque lo desees e incluso lo hayas intentado.

Puedes trabajar en una relación, pero hay una gran diferencia entre trabajar en algo e intentar forzar algo que sabes que no puede cambiar.

Incluso si os queréis de verdad, puede que no seáis una buena pareja. Queréis ser felices juntos, pero no lo sois.

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No puedes hacer nada al respecto, pero sigues intentándolo. La estás forzando a suceder porque te niegas a aceptar que no puede ser.

25 señales de que tu relación es forzada

Si no estás seguro de si estás intentando forzar tu relación en lugar de experimentar un amor verdadero y saludable, aquí tienes las señales que debes tener en cuenta:

Los signos de una relación forzada

Te encanta la idea de una relación, no a la persona.
Tienes que andar con pies de plomo a su alrededor.
Esperas que cambie.
No hacéis planes para vuestro futuro juntos.
No te entusiasma vuestro futuro juntos.
Estáis constantemente discutiendo.
No podéis resolver los conflictos.
Disfrutáis más del tiempo que pasáis separados que juntos.
No te importaría demasiado que la relación terminara.
Finges afecto en público.
Estás pensando en otras posibles parejas.
No confiáis el uno en el otro.
La chispa se ha apagado hace tiempo.
Finges interés, o lo hacen ellos.
No sois buenos amigos.
Tu amor es una adicción.
Te sientes inseguro o incómodo.
Es difícil amaros.
No estáis de acuerdo en las cosas importantes.
Solo los quieres a veces.
Te estás obligando a quererlos.
Les estás obligando a que te quieran.
Sabes que se acabó, pero no quieres aceptarlo.
Tienes miedo de dejarlos.
Sabes que estás forzando algo que no está destinado a ser.

¿Todavía no estás seguro de si estás forzando tu relación?

No es una situación fácil, y puede ser aún más difícil si no tienes a nadie con quien hablar de ello. Hablar con alguien es una gran manera de sacar tus pensamientos y preocupaciones de tu cabeza para que puedas trabajar en ellos.

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Habla con un experto en relaciones experimentado al respecto. ¿Por qué? Porque están capacitados para ayudar a personas en situaciones como la tuya. Pueden escucharte y ayudarte a determinar si esta relación es adecuada para ti o si estás ignorando las señales de alerta y siguiendo adelante con ella de todos modos.