1. No te comprometas contigo misma de ninguna manera
Esto es lo primero por una razón. Nunca debes hacer algo con lo que no te sientas cómoda solo por hacer reír a los chicos. Si te avergonzarías y te sentirías mal por ello, entonces no lo hagas.
Hacer reír a un par de idiotas no vale la pena que te sientas mal. Así que antes de intentar hacerles reír, piensa si realmente estás de acuerdo con hacerlo. Si no es así, entonces encuentra otra manera de hacer reír a los chicos.
2. Aprende sobre su sentido del humor
No puedes hacer reír a alguien a menos que sepas qué tipo de sentido del humor tiene. Sí, puedes tener suerte haciendo un chiste que creas que es gracioso, pero no todo el mundo comparte tu sentido del humor.
Así que si realmente quieres saber cómo ser divertida con los chicos, ¡aprende lo que ellos creen que es gracioso! Esto te permite utilizar esa información para formular tus propios chistes que se adapten a lo que ellos encuentran gracioso.
3. Observa cómo interactúan entre ellos
Si puedes, observa a los chicos con los que quieres ser divertida. Te mostrarán todo lo que necesitas saber sobre lo que se necesita para hacerles reír. Escucha lo que se ríen entre ellos y luego haz algunas cosas del mismo tipo.
4. Añade algo de sarcasmo
Casi todo el mundo piensa que el sarcasmo es divertido. Sin embargo, tienes que tener cuidado porque las personas que no son inteligentes pueden tener dificultades para averiguar que en realidad estás siendo sarcástica y no seria. Úsalo con moderación.
5. Haz referencia a cosas con las que estén familiarizados
No puedes hacer una broma sobre algo que los chicos no tienen ni idea. Por ejemplo, bromear sobre lo horrible que es la menstruación hará reír a otras chicas, pero lo más probable es que los chicos se sientan incómodos.
Tienes que hacer referencia a cosas que conocen bien. Averigua con qué están familiarizados para que puedas usar esas cosas para hacer chistes y hacerles reír. Además, les gustará el hecho de que conozcas las cosas que ellos hacen.