Aunque muchos estarían de acuerdo en que una familia ideal es aquella en la que los miembros están unidos, se aman y se apoyan mutuamente, ¿existe algo como estar demasiado unido a tu familia? Aquellos que experimentan señales de una familia codependiente dirían que sí.
Saber reconocer estos signos puede ser difícil porque a menudo se presentan como una familia cariñosa y unida. Sin embargo, lo cierto es que el sistema familiar codependiente es duro para todos los implicados y suele implicar un nivel de control que no se podría definir exactamente como un fuerte vínculo familiar.
Imagina a un pescador que lanza su red al agua para pescar un par de peces y acaba sacando más de cincuenta. Todos se agitan unos contra otros sin tener adónde ir.
Cuando piensas en una familia codependiente, puede tener la misma energía: familias que a veces están demasiado unidas para sentirse cómodas. La familia codependiente es aquella en la que no hay límites.
Características de las familias codependientes
Los signos de codependencia son difíciles de ver cuando se vive en ella. Estas familias se caracterizan generalmente por unos límites difusos, falta de autonomía individual y una excesiva implicación en la vida de los demás. Estas son cinco características comúnmente asociadas a las familias codependientes:
Ver a los demás como extraños: Es natural sentirse unido a tu familia, pero cuando la cercanía se convierte en un comportamiento controlador, crea un desequilibrio social.
Una línea difusa entre la crianza y la amistad: Muchos padres esperan tener algún día una amistad con sus hijos, pero esta amistad no debe anular su papel de padres. Los padres de las familias codependientes suelen involucrar a sus hijos en cuestiones de adultos que son inapropiadas para una dinámica saludable entre padres e hijos.
Excesiva implicación en la vida de los hijos: Un estudio demuestra que los vínculos familiares inseguros pueden afectar negativamente a la dinámica familiar. Implicarse demasiado en la vida de los demás puede perjudicar los estudios, el trabajo y las futuras relaciones fuera del hogar.
Evitar conflictos: Los niños de un sistema familiar codependiente suelen tener problemas para decir que no. Están tan centrados en complacer a sus padres que a menudo ceden a los deseos de su madre o su padre simplemente para evitar sentirse culpables o generar conflictos.
Fácilmente heridos o traicionados: Las familias codependientes tienen un nivel inusual de cercanía y se sienten heridas cuando su hijo o padre no quiere pasar tiempo juntos. Esto puede provocar una sensación desproporcionada de traición por pequeñas situaciones, como no pasar unas vacaciones juntos o romper planes sociales.
7 Maneras de Sanar el Trauma de la Codependencia Familiar
La codependencia familiar se basa en que tú y tu familia estáis prácticamente entrelazados, lo que dificulta la curación del trauma de vuestras experiencias.
Aquí tienes siete pasos clave para superar tu relación de codependencia:
Comprender los límites: Las relaciones familiares codependientes dificultan la creación de límites, ya que los miembros de la familia suelen estar demasiado involucrados en la vida personal de los demás. El primer paso para sanar es establecer límites que limiten el acceso de tu familia a tu vida personal.
Acudir a terapia: Encontrar un terapeuta que esté bien versado en el sistema familiar codependiente es el primer paso. La terapia puede ayudarte a entender las características de tu familia codependiente y por qué esta situación se convirtió en la dinámica de tu hogar.
Viaje hacia el autodescubrimiento: Uno de los signos más significativos de la codependencia en las familias es ser tan dependiente y apegado a tu familia que no te has tomado el tiempo de descubrirte a ti mismo. Emprende un viaje de autodescubrimiento dedicándote tiempo a ti mismo.
Establecer un sistema de apoyo: Curar el trauma de la codependencia familiar puede ser un proceso desafiante y emocional. Es esencial contar con un sistema de apoyo en el que apoyarse durante este tiempo.
Practicar el autocuidado: El autocuidado es crucial en tu viaje de sanación. Dedica tiempo a priorizar tu bienestar físico, mental y emocional.
Cuestionar las creencias negativas: Crecer en una familia codependiente puede llevar a creencias negativas profundamente arraigadas sobre ti mismo y tu valor. Trabaja en cuestionar y reemplazar estas creencias negativas por otras positivas y de empoderamiento.
Fijar y perseguir tus propias metas: Liberarte de la dinámica de codependencia significa recuperar tu propia identidad y perseguir tus propias metas y sueños. Tómate el tiempo necesario para identificar tus pasiones, intereses y objetivos que sean independientes de las expectativas de tu familia.
¿Tener una familia unida es lo mismo que tener una familia enredada?
No, una familia unida enfatiza los límites saludables y la individualidad, mientras que las familias enredadas borran los límites, lo que lleva a una falta de independencia e identidad personal.
¿Cómo se comporta una madre enredada?
Una madre enredada muestra una implicación emocional excesiva y sobreprotección hacia su hijo. Tiene dificultades para establecer límites, lo que generalmente lleva a hacer propias las necesidades y emociones de su hijo. Esto a menudo resulta en una falta de autonomía y dificultad para formar identidades separadas para el niño.
¿Son narcisistas los padres enredados?
Los padres enredados pueden exhibir tendencias narcisistas, pero no todos los padres enredados son narcisistas. El narcisismo implica un sentido inflado de importancia personal, mientras que el entrelazamiento se enfoca principalmente en límites borrosos y relaciones excesivamente involucradas.
¿Son tóxicas las familias enredadas?
Las familias enredadas pueden volverse tóxicas debido a la falta de límites e independencia. La dependencia emocional excesiva y los roles borrosos conducen a dificultades en el crecimiento personal, la autonomía y las relaciones saludables fuera de la dinámica familiar.
¿Cuál es la diferencia entre el enredo y la codependencia?
El enredo y la codependencia comparten similitudes, pero existen distinciones. El enredo enfatiza los límites borrosos y la implicación excesiva, mientras que la codependencia implica una dependencia poco saludable el uno del otro, a menudo arraigada en un rol de cuidador, comportamientos facilitadores y baja autoestima.
