Vivir separados juntos implica que una pareja con una relación íntima opta por vivir en diferentes lugares por diversas razones. Esta situación puede abarcar desde parejas que desean vivir juntas pero enfrentan restricciones (por ejemplo, familiares o religión) hasta aquellas que prefieren la separación o están tomando un descanso en su relación.
Según investigaciones, aproximadamente un tercio de los adultos estadounidenses no casados o cohabitantes mantienen algún tipo de relación de vivir separados juntos (LAT, por sus siglas en inglés). Esto significa que hay más parejas que viven separadas juntas de lo que se imagina.
Las parejas que viven separadas juntas pueden elegir vivir cerca o lejos una de la otra y reunirse cuando lo deseen. En estas circunstancias, tienen control absoluto sobre sus condiciones de vida separada juntos, sin verse obligadas a tomar decisiones basadas en factores externos.
Pros de vivir separados juntos
Mayor independencia
Cuando se vive separado, se evita la presión de tener que llegar a acuerdos sobre todas las decisiones. Cada persona puede elegir cómo decorar su espacio y establecer sus propias rutinas.
Valoración del tiempo juntos
Al verse menos frecuentemente, las parejas pueden apreciar más los momentos que comparten y aprovecharlos al máximo. Esto puede fortalecer el vínculo emocional.
Control sobre el horario
Vivir separado permite controlar el propio horario sin tener que coordinarlo con alguien más. Esto puede ser beneficioso para quienes priorizan su trabajo o sus pasatiempos.
Oportunidad para la reflexión
La distancia puede proporcionar el espacio necesario para reflexionar sobre la relación y tomar decisiones informadas. Esto puede ayudar a fortalecer el vínculo a largo plazo.
Romper estereotipos sociales
Las relaciones de vivir separados juntos desafían los roles de género estereotipados, permitiendo que ambos miembros de la pareja se desarrollen de forma independiente.
La distancia puede generar sentimientos de inseguridad y celos, especialmente si un miembro de la pareja siente que está recibiendo menos atención.
Potencial fin de la relación
Si no se gestiona adecuadamente, la distancia puede erosionar gradualmente el afecto y llevar a la separación. Esto puede ocurrir si una persona siente que tiene que viajar demasiado para ver a su pareja.
Dificultad para la intimidad
La distancia física dificulta la intimidad regular. Esto puede poner a prueba la relación, ya que el contacto físico es crucial para mantener un vínculo saludable.
Impacto financiero
Vivir separado puede suponer mayores gastos en alojamiento y servicios públicos en comparación con vivir juntos.
Requiere mucho esfuerzo
Mantener una relación de vivir separados juntos requiere un esfuerzo constante, como conducir largas distancias para verse y coordinar los planes.
¿Funciona vivir separados juntos?
Sí, vivir separados juntos puede funcionar, pero requiere una comprensión clara de las circunstancias individuales y un compromiso por parte de ambas partes. Muchas parejas han logrado que este tipo de relación funcione para ellos. Es esencial estar en la misma página y estar dispuesto a trabajar juntos para mantener viva la llama del amor.
Vivir separados juntos puede ser una opción viable para las parejas que desean mantener su independencia y aún así tener una relación comprometida. Sin embargo, es crucial sopesar cuidadosamente los pros y los contras y asegurarse de que esta disposición sea adecuada para las circunstancias y personalidades específicas de la pareja. Con el compromiso, la comunicación y el esfuerzo, es posible navegar con éxito este tipo de relación.
¿Cuál es la diferencia entre salir y vivir juntos?
Las relaciones varían según el nivel de implicación de la pareja. Salir es la fase inicial de una relación en la que dos personas intentan conocerse y evaluar su compatibilidad. Por otro lado, vivir juntos suele indicar una relación estable con grandes esperanzas de un futuro conjunto.
¿Por qué las parejas casadas optan por relaciones de convivencia separada?
Las parejas casadas que viven separadas juntas suelen hacerlo porque quieren mantener su independencia mientras siguen estando en una relación comprometida. A veces, las razones pueden ser prácticas, como requisitos laborales geográficos.
Además de vivir separados de su cónyuge por motivos de trabajo, también es posible que las parejas casadas vivan separadas porque pueden haber intentado vivir juntos sin éxito o haber estado en una relación/matrimonio anterior.
¿Es bueno vivir separados para un matrimonio?
El impacto de vivir separados en un matrimonio depende totalmente de las circunstancias particulares de la relación y de las personalidades de la pareja implicada.
Una pareja puede beneficiarse de vivir separada, ya que les permite llevar una vida independiente y tener su espacio sin ponerse de los nervios. Algunos pueden utilizarlo como un botón de pausa temporal para recargar energías y replantearse su relación.
Vivir juntos solos también puede ayudar a una pareja a darse cuenta de que están mejor separados y deberían alejarse de la relación.
Según la Dra. Jennifer Jacobsen:
El éxito de este acuerdo es único para cada relación. Algunas parejas pueden encontrar que vivir separados juntos es maravilloso, mientras que otras parejas ni siquiera considerarían tal acuerdo. Lo más importante es que tenga sentido para su relación única.
