Las amistades pueden ser una fuente de alegría y apoyo, pero a veces también pueden resultar dañinas. Si te estás preguntando si tus amigos son tóxicos, este test puede ayudarte a aclarar tus dudas.
¿Sientes que das más de lo que recibes en tus relaciones?
¿Puedes confiar en el consejo de tus amigos cuando lo necesitas?
¿Te encuentras excusando o disculpando su comportamiento?
¿Te pones nervioso antes de pasar tiempo con ellos por temor a discusiones o situaciones incómodas?
¿Te preguntas por qué sigues siendo amigo de ellos?
¿Confían en ti?
¿Crees que hablan de ti cuando no estás presente?
¿Sientes que estás en constante competencia con ellos?
¿Cuestionas sus motivos e intenciones, creyendo que pueden estar actuando por razones egoístas?
¿Todavía disfrutas pasar tiempo con ellos?
Interpretación de los resultados
Si respondiste “A” (Sí) o “B” (A veces) a varias de estas preguntas, es posible que tengas amigos tóxicos. Las amistades tóxicas pueden tener un impacto negativo en tu bienestar emocional y autoestima.
Las amistades saludables se caracterizan por el apoyo mutuo, la confianza y el respeto. Si tus amigos no cumplen con estos criterios, puede ser el momento de reconsiderar tu relación con ellos.
Consejos para lidiar con amistades tóxicas
Establece límites: Comunícales a tus amigos tus límites y expectativas.
Prioriza tu propia felicidad: No tengas miedo de alejarte de situaciones o personas que te hacen sentir mal.
Busca apoyo: Habla con un amigo de confianza o un terapeuta sobre tus preocupaciones.
Termina la amistad gradualmente: Si es posible, reduce gradualmente el contacto con tus amigos tóxicos para evitar un corte abrupto.
