Cumplir 30 años es un paso monumental para cualquiera. ¿Estás equipado con las lecciones de vida esenciales para sobrevivir en la próxima década de tu vida? Deja que ese pequeño dato se asimile por un momento… La transición de los 20 a los 30 no se producirá en incrementos predecibles. En cambio, un día te despertarás, te mirarás en el espejo y te darás cuenta: “Estoy en mis 30”.
Se sentirá como si el tiempo hubiera pasado volando en un abrir y cerrar de ojos, y te sentirás como si estuvieras en un camino diferente. Las lecciones que aprendas no te llegarán de repente a la cabeza como un maremoto de sabiduría. En cambio, sentirás algunos cambios leves en la forma en que percibías las cosas cuando eras adolescente y tenías 20 años.
30 verdades de la vida que necesitas a los 30
Si sientes que tus 30 se acercan y no has aprendido lo suficiente, aquí tienes un curso de repaso. A continuación se presentan 30 verdades de la vida que todos deberían saber a la edad de 30 años:
1. Tu cuerpo no estará tan en forma y fuerte como antes.
Tu metabolismo se ralentiza a medida que envejeces, por lo que no puedes mantenerte tan en forma como antes sin un poco de esfuerzo.
2. Tus 20 te alcanzarán, así que prepárate.
Todo el alcohol barato, los cigarrillos, los malos hábitos de sueño e incluso los peores hábitos alimenticios te alcanzarán algún día. Cambia un estilo de vida poco saludable antes de que cause daños irreparables a tu cuerpo.
3. Es el momento perfecto para invertir en piezas clásicas en tu vestuario.
Tus 20 años son el momento de la exploración de la moda o de seguir las tendencias. En tus 30, la ropa de trabajo apropiada y un vestuario respetable son más importantes.
4. Ahora es la comodidad sobre la moda cuando se trata de ropa y zapatos.
Los zapatos que te aprietan los pies o esa camisa demasiado ajustada pueden dar paso a piezas más prácticas. Claro, algunos de ellos pueden parecer anticuados, ¡pero son mucho más cómodos!
5. Los niños pueden ser tu mayor alegría y tu mayor dolor.
No importa lo que hagan tus hijos, siempre encontrarás en tu corazón amarlos y perdonarlos.
6. Todo el mundo necesita pasión en su vida.
Ya sea entusiasmarse con un videojuego o albergar un amor intenso por un autor, tu pasión te da ese entusiasmo añadido por la vida.
7. Las experiencias te harán más feliz que las posesiones.
La alegría de conseguir cosas nuevas se desvanece con el tiempo. Las experiencias como un viaje fuera de la ciudad o una larga conversación significativa, por otro lado, te permiten apreciar esos recuerdos una y otra vez.
8. Permanecer en un trabajo que odias no vale la pena.
Si no te sientes realizado en tu trabajo, sal y ábrete a nuevas opciones de empleo. Perder el tiempo en un trabajo que desprecias sólo causará estragos en tu mente y tu cuerpo.
9. Tus planes no siempre llegarán a buen puerto.
Los planes que tenías cuando tenías 20 años eventualmente cambiarán de acuerdo a quién te estás convirtiendo. Deja que suceda.
10. Algunas cosas buenas suceden por suerte, pero eso no significa que no debas mejorar tus posibilidades.
Tienes suerte si tienes tu gran oportunidad por casualidad. Pero recuerda, también necesitas trabajar en tu oficio para ser celebrado en tu campo.
11. El aprendizaje nunca se detiene.
Cada día puede ser una experiencia de aprendizaje. Puedes pensar que estás aprendiendo algo irrelevante hoy, pero nunca se sabe cuándo podrás usar esta información.
12. El viaje importa tanto, si no más, que el destino.
Usemos una analogía: Cuando estabas en el instituto, ¿estabas más preocupado por las lecciones que aprendiste y los amigos que hiciste o por el trozo de papel que te dan cuando terminas?
13. Cambiarás y no a todo el mundo le gustará.
Nuestro yo más joven se habría sentido devastado al saber que a alguien no le gustamos. A medida que avanzas en la vida, te darás cuenta de que no es tu trabajo complacer a todo el mundo.
14. Algunas cosas valen la pena esperar, y depende de ti averiguar cuáles son esas cosas.
Puede ser cualquier cosa, desde el hombre o la mujer de tus sueños hasta esa vacante de trabajo que has estado esperando. La cuestión es que sólo TÚ puedes determinar cuánto tiempo estás dispuesto a esperar por ellos.
15. El pasado no debe dictar tu futuro.
No llevas tus errores y fracasos en la manga. No todo el mundo lo sabrá, y no a todo el mundo le importará. No dejes que un pasado oscuro extienda su mancha a tu futuro.
16. Está bien cambiar de modelo a seguir.
Puede que hayas idolatrado a Lady Gaga, Beyonce o Barney Stinson en tus 20 años porque son quienes querías ser. ¡Pero cuando tengas 30 años te sorprenderá que tu modelo a seguir pueda ser tu padre, una figura histórica o incluso un personaje de ficción!
17. Tus deudas pueden perseguir tu futuro.
Las deudas de tarjetas de crédito impagas, los préstamos bancarios y los préstamos estudiantiles afectarán a tu puntuación de crédito. Esto afectará en gran medida a tu credibilidad cuando necesites pedir dinero prestado en el futuro.
18. Todo el mundo necesita placeres sencillos.
Es importante tener ese hábito de estímulo fácil de hacer para superar un día particularmente estresante. Ya sea acurrucarte con tu mascota o comer un trozo de pastel, estos pequeños placeres pueden darte el impulso adicional que necesitas para seguir adelante.
19. Debes aprender a aceptar el cambio para seguir adelante.
Las cosas cambiarán a tu alrededor, te des cuenta o no. Tu clave para abrazarlo es tu capacidad de adaptación y tu voluntad de seguir adelante.
20. La amabilidad y la compasión significan más que la inteligencia y las riquezas.
La gente te recordará más por tu amabilidad que por tus ingeniosas ocurrencias o por esas veces que pagaste su cuenta en el bar.
21. Perderás amigos en el camino, ¡y eso está bien!
Los nuevos trabajos, cónyuges, hijos y pasatiempos a menudo hacen que los amigos se separen. No tienes que mover cielo y tierra para seguir siendo tan cercano como antes. En cambio, aprende a dejar ir y a formar nuevas amistades.
22. Debes amar a tus padres mientras aún estén aquí.
No estarán ahí para guiarte para siempre. Reconecta con ellos, conócelos un poco más profundamente y, sobre todo, aprende de la sabiduría que aún pueden darte.
23. Una disculpa sincera puede enmendar una gran grieta.
No importa lo tardía que sea tu disculpa, el impacto puede ser lo suficientemente grande como para restaurar tu relación a como era antes.
24. Nada se siente más ligero en el alma que el perdón.
No es necesario que lo olvides; pero una vez que has perdonado a alguien, puedes dejar ir lentamente el peso que su maldad ha cargado sobre ti.
25. Las malas relaciones están ahí para aprender.
No te castigues por estar en una mala relación. Aprende de la experiencia y señala las señales de advertencia para que no vuelvan a ocurrir.
26. No siempre puedes cumplir tus promesas, pero esfuérzate por cumplirlas de todos modos.
Para evitar la incómoda situación de romper una promesa, ten cuidado a quién se la haces.
27. El amor no siempre es suficiente.
En tus relaciones, puedes darte cuenta de que no importa cuánto ames a una persona, puede haber otras cosas más grandes que pueden impedir que tengan un futuro juntos.
28. La inteligencia es contagiosa.
Rodéate de aquellos que son más inteligentes que tú. Aprendemos más de las personas que nos rodean de lo que pensamos. La estimulación mental en forma de conversaciones inteligentes puede ser una de las experiencias de vida más satisfactorias.
29. La amabilidad se puede encontrar en los lugares más insospechados.
Boo Radley y el Buen Samaritano son grandes ejemplos de esto. No dejes que la cultura o la apariencia de alguien te hagan pensar que no es capaz de ser amable.
30. 30 no es “viejo”.
Ahí está el pavor que sienten muchos veinteañeros cuando se acercan a los 30. No vendrá como un aluvión de canas y arrugas. Puedes verte y sentirte tan fresco y en forma como en tus 20, ¡pero estarás armado con mucho más conocimiento! ¡Abraza tus 30!
La vida se trata de aprender en todas sus diferentes formas. Las cosas que sabías en tu adolescencia, en los 20, en los 30 y en los 40 cambiarán con el tiempo. Y dentro de estos cambios están las verdades de la vida que aprenderás a tu propio ritmo, a tu manera. Abraza tus 30 años a medida que se acercan, ¡y no olvides llevar estas lecciones de vida contigo!